jueves, 7 de junio de 2012

ENTREVISTA A CONNAN:

P.D.: ¡Hola, hola! Hoy por la tarde me aburría mucho. Mis principales fuentes de entretenimiento estaban muertas en cuanto a actividad, así que me he puesto a delirar introduciéndome en la mente de Connan^^. Os dejo con este demonio desvergonzado y sus descaradas respuestas ;).





1.    ¿Nombre completo?:
(Connan alza una ceja escéptico, las piernas cruzadas sobre un asiento de cuero rojo frente a la entrevistadora. Su rostro denota la ofensa que le supone una pregunta así) —¿Me estás preguntando por mi nombre? Todo aquel que se enorgullezca de ver buen cine me conoce. Siguiente pregunta (dice con arrogancia, tajante).

2. ¿Signo del zodiaco?:
—Acuario (contesta casi con aburrimiento. Después sonríe en correspondencia a un pensamiento fugaz que enseguida expresa en voz alta) —Y en la pecera perfectamente caben dos (murmura tras una provocadora sonrisa, logrando que las mejillas de la entrevistadora se ruboricen).

3. ¿Edad?: 
—¿Acaso importa? La edad solo acentúa las virtudes o los defectos, pero rara vez le otorga a alguien un cambio radical (aclara encogiéndose de hombros, restando importancia a la cuestión. Después añade:)  —En mi caso el paso del tiempo ha engrandecido la masa de virtudes que soy, por supuesto.


4. ¿Qué color de ropa interior llevas puesto?: (La entrevistadora prácticamente tartamudea la pregunta, con el reflejo del arcoíris en el rostro, pasando por todos los colores de la vergüenza).
 (Connan lanza una sonora carcajada, la cual encuentra su punto culminante al advertir el apuro en que se siente la jovenzuela) —¿No le parece una cuestión demasiado privada? (le pregunta a la joven con una mirada diabólica, obligándola aposta a interactuar de más llegados a ese punto que tanto embarazo le causaba).
—Yo no he pre-preparado las pregun-guntas (se excusa ella con nerviosismo).
(Connan no aparta su mirada divertida de ella) —No es que me cause pudor, pero creo que respondértela en privado dará más juego que soltarlo aquí delante, lo cual no me deja opción de disfrutar de tu impúdica curiosidad.
(Aquella sugerencia intensificó el rubor de la joven, si cabe).

5. ¿Peor sentimiento en el mundo?: (prosigue atropelladamente la joven, queriendo dejar atrás lo antes posible el tema de la ropa interior. Sus mejillas aún continúan violentamente arreboladas).
—La pasión insatisfecha (dice inmediatamente Connan, pero el humor en el fondo de sus ojos advierte de que bromea) —No, eso es algo que desconozco (Se corrige. Después se pone serio y contesta) —El orgullo herido.

6. ¿El mejor sentimiento del mundo?: 
—¿Siendo sinceros? (pregunta él recuperando el tono despreocupado, y la joven asiente mirándolo con desconfianza, pues es perfectamente consciente del divertimento que él encuentra avergonzándola) —Temo que me censuren (confiesa esbozando una sonrisa lobuna) —Así que públicamente me decanto por la realización personal.

7. ¿Qué es lo primero que haces al despertar?: 
(Él se encoge de hombros) No es que siga ninguna pauta. Nunca suelo saber dónde amaneceré, con quién, o en qué circunstancias. Y mis acciones posteriores se ven alteradas por la situación, obviamente.

8. ¿Perdonarías una infidelidad de tu pareja?:
(Connan no esconde la diversión que le causa la pregunta, y las comisuras de sus labios se elevan) —¿Estás calibrando mis capacidades amatorias, nena? Cada vez estoy más convencido de que te intereso (comenta vacilón, logrando que la muchacha baje la vista y sufra otro acaloramiento) —La verdad es que no (contesta, entonces, adoptando un aire firme) —Yo considero la traición como algo irreversible.

9. ¿En estos momentos odias a alguien?:
—Sí. Y de alguna manera odiar alguien me recuerda la clase de calaña que hay en el mundo y me frena a la hora de resultar demasiado cortés con la gente. Bastante útil, ¿no?

10. ¿Has odiado tanto como para querer matar a alguien?: 
(Los ojos de Connan son dos océanos insondables cuando responde sin vacilar:) —Es posible. El odio es un sentimiento muy fuerte y esperpéntico como para no suscitar deseos que se ajusten a su definición, ¿no?

11. ¿Has guardado secretos?:
—Por supuesto. Los secretos no deben dejar de serlo, porque por algún motivo se ocultan con celo. Y la mejor manera de mantenerlos a buen recaudo es guardarlos hasta que se fundan en el olvido.

12. ¿Qué champú utilizas?: 
—Me encanta el orden coherente que siguen estas preguntas (señala con ironía) —Y no utilizo nada especial. Ya poseo la materia prima, donde está lo verdaderamente esencial, y no en el nombre impronunciable de cualquier estúpido producto.

13. ¿En qué piensas?: 
(Connan vuelve a poner una expresión que rezuma lujuria, y la joven no tarda en lamentarse de su suerte) —Primero asegúrame que no estallarás de vergüenza. Aunque sea un tipo bastante inescrupuloso no me gustaría pasarme una semana entera dividiéndome entre la televisión y la prensa para explicar el extraño suceso de la muchachita que explotó de vergüenza.
—Cre-creo que será mejor pa-apasar a la sigui-guiente cuestión (dice torpemente la muchacha, totalmente sofocada).
(Connan se encoge de hombros) —Cómo quieras. Pero se trataba de algo muy halagador.


14. ¿Qué canción le dedicarías  alguien que te gustase?: 
—La música la pondría ella, seguro (contesta Connan dejando caer un pícaro guiño).

15. ¿Tatuajes?: 
—No. Bastantes marcas deja ya la vida, ¿no crees?

16. ¿Has estado en otro continente?:
(Connan levanta una ceja, burlón) —¿Es una broma, no? (Pero la joven lo mira esperando una respuesta más elaborada, y prosigue a añadir más palabras:) —Obviamente que sí. Cómo se dice: he pisado los confines de la Tierra, escalado un sinfín de montañas, surcado todos los mares y también saboreado todas las gamas de piel de mujer. Blá, blá, blá.

17. ¿Pepsi o Coca Cola?:
(Connan resopla con desdén) —Por Dios, estás hablando con un hombre de los píes a la cabeza. Anota “Cerveza”.

18. ¿Tipo de música?: 
—Rock clásico sobre todo.

19. ¿Tema de conversación más detestado?: 
—Cualquiera con cualquiera. Aún no he encontrado nadie que me dé una estimulante conversación demostrando ser un rival mental para mí. O si lo he encontrado, nadie se ha atrevido a contrariarme. Y que te den siempre la razón es de lo más aburrido. (Busca una cámara cercana y fija la vista directamente en el objetivo, que corresponde a sus deseos ajustando el foco en su perfecto rostro adonizado. Y él aprovecha para dar un mensaje a nivel estatal) —Así que, bellas mujeres del mundo, por favor, intercalar el gimnasio con ejercitar un poco vuestras neuronas y demostrarme que sois dignas de una relación más allá de lo esporádico.  

20. ¿Color favorito?: 
—Azul marino.

21. ¿Tienes pareja?:
(Connan lanza un resoplido que deja bastante claro su opinión acerca de lo absurdo del interrogante) —Por supuesto. Me encanta arrojar todo mi encanto seductor a las chicas ajenas a ella delante de medio mundo porque la discusiones que genera son la parte más jugosa de nuestra relación (contesta con marcado sarcasmo).

22. ¿Amigos especiales?: 
—Gracias al Cielo, existe al menos alguien digno de entrar en esa categoría. Como ves, la lista a aspirar es corta. Pero no me quejo. Sé que desear más es ser demasiado entusiasta.

23. ¿Rolling Stones o Beatles ?: 
—Me decanto por los Rolling.

24. ¿Tímido(a) o extrovertido(a)?: 
—Tímido. Nunca he podido imaginarme a mí mismo frente a una gran multitud de espectadores pendientes de cada frase que digo. La simple idea me da vértigo…

25. ¿Tu apodo?: 
—¿SuperSexy? Qué sé yo.

26. ¿Hablas algún idioma?:
—No. Mi evolución lingüística cesó en la Edad de Piedra.

27. ¿Palabra/frase típica?: 
—Me encanta decir y experimentar en mis carnes la siguiente frase (de mi propia cosecha, que conste): El dinero es licencia para patear culos (admite apenas logrando reprimir una risotada).

28. ¿Dulce o Salado?: 
—Salado es el sabor de la piel, ¿no?

29. ¿Lugar preferido?: 
—París.

30. ¿Conformista o inconformista?: 
—Inconformista. Uno no alcanza sus mayores ambiciones conformándose con situaciones que no están a la altura de sus deseos.

31. ¿Crees que el amor puede durar eternamente?: 
(Se carcajea) —Date por respondida.

32. ¿Dónde vives?: 
—Una pregunta en verdad inexplorada, sobre todo teniendo en cuenta la jauría de periodistas que acostumbra a hacer vida diaria en mi puerta (responde empleando una agria ironía).

33. Comida favorita: 
—Salmón a la escabeche es la respuesta que buscas, seguro. Aunque en mi pirámide gastronómica personal la cima lo ocupa algo más… escandaloso.

34. ¿Besos o abrazos?:
(Connan frunce los labios, muy disgustado)  —¿No me obligaréis de verdad a escoger entre dos opciones que son menguadamente complacientes como antecesoras al Gran Deleite, no?

35. ¿Qué te enoja mucho?: 
—El aburrimiento. Nos soporto estar aburrido. No soporto las preguntas aburridas (contesta, mientras mira a la entrevistadora con evidencia).

36. Si tuvieras a Dios enfrente, ¿qué le dirías?: 
—No me fiches en el cielo, ya tengo hechos grandes planes en el Infierno.


37. ¿Frase más barata para romper el corazón?: 
—<<No eres tú, soy yo>>, <<Necesito un tiempo>>, <<Te mereces a alguien mejor>>, <<Me atrae más tu madre>>, <<Me acabo de comprar un descapotable biplaza que solo vamos a ocupar yo y mi libertad>>. (bostezo)  —Etcétera, etcétera.


38. ¿Has conocido a alguien importante?: 
—El espejo siempre tiene a alguien importante que presentarme.

39. ¿En que te fijas primero en el sexo opuesto?: 
—Me temo que resultaría ofensivo. Mejor me refugio en mi máscara de caballero (risas).


EPÍLOGO:

—Y con esto he finalizado la entrevista —comunica la entrevistadora, tratando de aparentar efusiva y segura, y aunque su rostro logra ser convincente, sus manos tiemblan de nerviosismo mientras sujeta las tarjetas en las que llevaba sus frases impresas.— Connan Knight, le deseo una feliz noche y un futuro aún más triunfador si cabe. Muchas gracias por acompañarnos.

—Muchas gracias, preciosa —contesta él, escrutándola con unos ojos rebosantes de diversión—. Aunque no tienes por qué despedirte de mí tan pronto, ya lo sabes. 

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